jueves, 17 de marzo de 2011







Sinceramente, no busco que me llames cada dos minutos,
ni tenerte todo el rato aquí conmigo.
No quiero oír un te quiero sin sentido, ni encontrar en ti
una sonrisa cansada. Ni siquiera pretendo que te desesperes cuando no hablamos, pero . . Espera. Olvida todo ésto.
Llámame, quédate a mi lado siempre, dime que me quieres hasta que me canse y sonríeme aunque no haya motivos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario